Las salidas a bolsa pueden representar una oportunidad única o, por el contrario, convertirse en una mala inversión.
Hay ejemplos de todo tipo, sólo en el sector de Internet y las nuevas tecnologías disponemos de decenas de casos en los que una empresa se estrena en Bolsa y, en pocos años, acaba conquistando el mundo como puede ser Google, Amazon, Apple, Facebook… y al contrario, empresas que fueron una referencia en sus correspondientes sectores y en los mercados bursátiles se dejaron millones de pérdidas.
Es por ello por lo que esta semana analizamos en este artículo el riesgo en operaciones que implican salidas a bolsa y algunos consejos a tener en cuenta, con el fin de aprovechar las oportunidades y desechar las malas inversiones.
El hándicap del análisis histórico y el Equity Story
Cuando nos planteamos invertir en un valor, normalmente analizamos el histórico de su cotización, la trayectoria de la marca y cómo le han afectado las diferentes coyunturas económicas, pero en este caso no podemos fiarnos de este tipo de datos, ya que la empresa nunca ha cotizado, y esto supone un handicap a la hora de invertir.
Sin embargo, las empresas que comienzan a cotizar ya disponen de un recorrido como empresas operativas, esto nos puede dar algunas pistas de cómo se va a comportar una vez comience a cotizar. El Equity Story, por ejemplo, nos permite comprobar los hitos de la empresa, el estado de sus cuentas, sus proyectos a futuro, etc. Nuestro objetivo como inversores será determinar su estado actual y su plan de negocio a futuro. Ya que esto influirá en gran medida en la cotización de sus acciones y su evolución. Por ello, la empresa que se estrene en Bolsa debe contar con un plan de negocio creíble, con hitos comprobables y objetivos medibles.
Las oportunidades de las OPV
Se denomina OPV a la salida a Bolsa de una empresa que comienza a cotizar, estas siglas hacen referencia a los términos Oferta Pública de Venta. Por lo tanto, una salida a Bolsa se da en el momento en que una empresa comienza a cotizar en el mercado bursátil, donde todo el mundo puede comprar y vender sus acciones.
Sin duda, las mejores oportunidades todavía se encuentran en el sector de las start-ups, empresas habitualmente tecnológicas que tienen un cierto desarrollo con bastante éxito, y que buscan una fuente de financiación en el mercado de valores. Algunas de estas empresas consiguen una rentabilidad espectacular, por ejemplo, Apple llegó a bolsa en diciembre de 1980 por 22 dólares la acción, hoy en día la acción ronda los 322 dólares. También podemos destacar Spotify, Dropbox, Eventbrite o Uber.
4 consejos para ganar con las salidas a Bolsa
1️⃣✅ Primero: es importante revisar que empresas han declarado su intención de salir a Bolsa y en qué circunstancias o motivos. Muchas compañías emiten un comunicado que posteriormente se filtra a prensa y también existen páginas webs que recogen un calendario con las próximas salidas a Bolsa. Esto es importante para poder analizar con tiempo y poder tomar una decisión la inversión. El último caso es el de Airbnb que lanzó un comunicado indicando que se prepara para salir a Bolsa en 2020.
2️⃣✅ Segundo: debemos analizar todos los detalles de la empresa, su recorrido, sus hitos, proyectos a futuro… en definitiva, el Equity Story que mencionamos al comienzo de este artículo. Con el fin de determinar si será o no una buena inversión. Por ello es importante contar una sólida formación, recuerda que los libros, seminarios o cursos son siempre una buena herramienta.
3️⃣✅ Tercero: debemos evaluar a qué precio saldrá las acciones para comenzar nuestro análisis. Ya que, en ocasiones, se fijan precios de salida muy altos y lo que ocurrirá es que el arranque del mercado será a la baja. Por lo que incluso en ese escenario podemos “apostar” al lado bajista y posteriormente comprarlas a precios bajos. Podemos ver el caso de Lyft. Cuyas acciones salieron a $72 y en dos semanas habían caído un 37%. Aunque con el trading esas caídas también pueden ser rentabilizadas.
4️⃣✅ Cuarto: no se trata de “comprar a lo loco” por el simple hecho de que una compañía se estrene en Bolsa. Se trata de analizar la compañía y, sino lo tenemos claro, esperar unas semanas o el primer mes de recorrido, hasta que la compañía se asiente y se establezca su cotización. Y recuerda analizar el recorrido como empresas operativas,
El riesgo de las empresas que comienzan a cotizar
Como vemos en el caso de Lyft, algunas salidas a bolsa también entrañan riesgos, ya que no todas se estrenan como ellos esperan. Por ello, es importante conocer a fondo los valores en los que vamos a invertir y las características de las empresas que comienzan a operar en bolsa, mediante los conocimientos que hayamos adquirido a través de la formación.
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